"Quentin Fields era jugador de baloncesto, también era hijo, hermano, compañero de equipo y amigo. Yo no conocí a Quentin Fields, y ya nunca lo conoceré. ¿Nunca te has preguntado que pasaría si dejaras de estar aquí? Si desaparecieras de repente, ¿cómo reaccionaría tu mundo? Pues todo lo que imaginaste es falso. La muerte no tiene nada de romántico, el dolor es como el océano: profundo, oscuro, y más grande que nosotros. Es como un ladrón en la noche: callado, perseverante, injusto, diluido por el tiempo, el destino y el amor. Yo no conocí a Quentin Fields, pero siento celos de él, porque veo cómo afecta su ausencia a la gente que le conoció, sé que era importante para ellos y que era amado. Dicen que Quentin Fields fue un gran jugador de balocesto, elegante, genial y ejemplar. Dicen que en sus mejores noches parecía como que volaba. Ahora lo hace".
Samantha Walker.
No hay comentarios:
Publicar un comentario